Ya con la primavera a la vuelta de la esquina, es el momento indicado para evaluar si tu local tiene todo lo necesario para adaptarse a los cambios de estaciones, y de qué manera puedes transformarlo en un lugar versátil que tome los cambios de luz y temperatura anuales a su favor.
Diseñar un local comercial que se adapte a las estaciones del año es un desafío que requiere una planificación meticulosa y un enfoque flexible. Desde la optimización de la ventilación natural hasta la selección de materiales adecuados, cada aspecto del diseño debe considerar las variaciones estacionales.
Teniendo en cuenta que cada vez se hacen más notorios los cambios de estaciones en el mundo, y particularmente en nuestro país, adaptar tu local comercial a estas variaciones climáticas no solo mejorará la experiencia de tus clientes, sino que también puede optimizar el funcionamiento del espacio y reducir costos.
Hoy compartimos algunos consejos prácticos sobre cómo diseñar (o re-diseñar) tu local comercial para que sea versátil y eficiente durante todo el año:
1. Identifica las variaciones climáticas de cada estación del año
Dado que nuestro país se extiende desde el desierto del norte hasta zonas australes frías y lluviosas, es importante que, antes de comenzar el diseño, tengas detectadas las condiciones climáticas específicas de tu ubicación.
En Santiago, por ejemplo, los veranos pueden ser extremadamente calurosos, mientras que en el sur, como en Valdivia o Puerto Montt, los inviernos mucho son más fríos y húmedos. Esta información te ayudará a seleccionar los materiales de construcción, tipo de iluminación, y otras consideraciones que deberás tener para el local.
2. Considera qué tipo de ventanas o ventilación serán las adecuadas
Las ventanas juegan un papel vital en la regulación de la temperatura y la entrada de luz natural. En verano, tener ventanas grandes que permitan la ventilación cruzada y el ingreso de aire fresco serán un plus. Y en invierno, dado que hay menos luz, estas mismas ventanas grandes ayudarán a los clientes a disfrutar las horas de luz que alcancen a tener dentro de tu local.
Si estás en una zona donde ya sabes que el calor tiende a ser excesivo en verano, utiliza persianas o cortinas que se puedan ajustar para bloquear las altas temperaturas.
Una buena recomendación es tener ventanas termopanel, dado que ayudan, tanto a bloquear el paso del calor, como del frío intenso del invierno.
Otro buen tip es –si lo permite el presupuesto– instalar aire acondicionado, ya que permite tener versatilidad de ventilación durante todo el año.
3. Selecciona los materiales de construcción adecuados
La elección de materiales impacta directamente en la eficiencia energética y la comodidad de las personas que visitan tu tienda.
En regiones húmedas del sur, es fundamental utilizar materiales resistentes a la humedad, moho y hongos, como revestimientos de fibrocemento o cerámica para las paredes exteriores. En zonas más cálidas, será más conveniente construir con materiales que reflejen el calor como aislantes térmicos.
Para interiores, utilizar materiales que faciliten la regulación de la temperatura será importantísimo para que tu local entregue un ambiente agradable en cualquier estación del año.
4. Implementa un buen sistema de climatización
En invierno, opciones como calefacción por suelo radiante son ideales, ya que generan calor uniforme y son energéticamente eficientes. En verano, tener aire acondicionado adecuado o sistemas de ventilación que permitan la circulación efectiva del aire serán tus mejores aliados. También incorporar termostatos inteligentes, dado que indicarán cuándo ajustar la temperatura según las condiciones externas y las necesidades del local.
5. Incluye diseño de espacios flexibles
La flexibilidad en el diseño permite adaptarse a diferentes necesidades a lo largo del año. La recomendación principal es utilizar muebles modulares o móviles que puedan reconfigurarse según la temporada. En invierno, la tienda puede tomar un diseño más cerrado y acogedor, con áreas de descanso cómodas. En verano, un diseño más abierto y ventilado entregará una sensación de frescura y mayor ventilación más fresca.
Si tienes terrazas, una buena idea es acompañarlas de estufas de patio en invierno, y ventiladores en verano.
6. Adapta la Iluminación a las estaciones del año
Como mencionamos en el punto 2, La iluminación adecuada puede cambiar significativamente la atmósfera del local, y por ende la experiencia de quienes la visiten. Durante los meses de invierno, utiliza luces cálidas para crear un ambiente agradable, dando la sensación de calidez. En primavera y verano, complementa la luz natural con iluminación que aporte frescura y vitalidad al espacio.
Si es posible que instales sistemas de iluminación regulables que te permitan ajustar la intensidad y el tono de la luz según la estación y la hora del día, harás de tu local un lugar notoriamente más agradable.
7. Juega con el diseño de exterior y paisajismo
Lo primero que ven tus clientes es el exterior de tu tienda, por lo que esta zona también debe adaptarse a las estaciones. En primavera y verano, incorporar elementos como plantas, flores y áreas verdes que atraigan a los clientes y embellezcan el entorno generará interés visual. En otoño e invierno, puedes aplicar decoraciones temáticas que mantengan el atractivo visual del local.
Si estás en una zona de mucha lluvia –o en días de temporal en la capital– tener disponibles alfombras que sequen bien el calzado, y canastos para dejar el paraguas mientras las personas visitan tu tienda hará una gran diferencia.
8. Implementa soluciones sostenibles
Integrar soluciones sostenibles en el diseño de tu local no solo ayuda al medio ambiente, sino que también puede reducir los costos operativos y hacerla más atrayente para aquellos clientes que buscan coherencia entre su estilo de vida y dónde consumen sus productos.
El uso de paneles solares para generar energía, sistemas de reciclaje, o usar materiales de construcción reciclados, además de abaratar costos en tu operación, logrará demostrar el compromiso de tu empresa con prácticas responsables y sostenibles.
La flexibilidad es la clave
Como mencionamos en los puntos anteriores, tu local comercial debe ser capaz de adaptarse a toda temporada y condiciones climáticas, por lo que la clave para lograrlo es la “flexibilidad”.
Que tu mobiliario permita ajustes continuos durante el año será un gran beneficio diferenciador con respecto a tu competencia. Realizar evaluaciones periódicas del rendimiento del espacio y, si es posible, implementar encuestas a tus clientes para identificar áreas de mejora, también te ayudará a lograrlo.
Diseñando un espacio de alta adaptabilidad, garantizará que sea atractivo y eficiente durante todo el año.